El reloj apenas marcaba las primeras horas cuando nuestros pasos se apresuraron hacia las puertas del aeropuerto El Dorado. La emoción era palpable, pues aguardaba el arribo de seres cuyas vidas pronto se entrelazarían con la nuestra. Rod Luque, cantante panameño de sonrisa franca y cuya voz cautiva con matices celestiales, llegaba acompañado de Ginnie Haskins, una poetisa de mirada soñadora, cuyos versos encantados parecían surgir de un universo más puro que este mundo terrenal. Sin perder tiempo, los arrastré a ambos al vórtice urbano. Abordamos uno de esos Transmilenios donde los capitalinos nos apretujamos, y con sus maletas a cuestas, arrancamos la gira por los circuitos bogotanos. Primera escala obligada:la embajada de Panamá nos rodeó con su calidez característica. Después, en la Iglesia IC Creyentes, las palabras de Rod tronaron: “Debemos estar en el centro de la voluntad de Dios”, un mensaje que nos anclaba en lo trascendente.Continuamos nuestra travesía hasta posarnos en el hotel cercano a Corferias, corazón de la FILBo palpitante. La noche trajo consigo una entrevista memorable con Karen Lorena Laverde, en su medio “Linaje Escogido” una conversadora de porte exquisito cuyas preguntas nos condujeron por senderos del Espíritu. Al día siguiente la cita era en Desafío Medios donde palpitamos la grandeza divina de lleno. Rod Luque nos regaló un íntimo unplugged de su canción “Amor Inexplicable”. que pronto disfrutarán a través de los canales de este medio. ¡Manténganse atentos!. La FILBO nos franqueó sus puertas a pesar del tumulto desbordante y una lluvia tempestuosa. Ginnie cautivó cada rincón con su gracia, presentando sus aclamados poemarios “Conexión, poemas que te conectan con Dios, el amor y la vida” e “Inmersión, un viaje al ser”.Esta urbe, tantas veces estigmatizada, se vistió de gala para recibirlos.